Esta semana santa (que por cierto de santa solo tiene el nombre, maldita primavera) estuve en Belice, aquel bello y pequeño país que se ubica al otro lado de la frontera sur de México, junto a Guatemala. Dicho país cuenta con el segundo arrecife más largo del mundo, el cual es Patrimonio Mundial de la UNESCO y que sinceramente está bien chingón verlo buceando o snorkeleando.
¿Qué tiene que ver ese arrecife con uno de los hombres más ricos del país? Salinas Pliego se encontraba en su yate esta semana en Belice, seguramente estaba disfrutando de las bellezas naturales del ambiente, cuando su yate de lujo sufrió un problema y tuvo que soltar el ancla, y al hacerlo, destruyó más de 25 metros de arrecife.
Lo que cometió Salinas Pliego es un délito, es una mentada de madre y es atentar contra el mundo. Este hombre merece irse a la carcel, desgraciadamente huyó en su yate y las autoridades beliceñas no lo pudieron detener. ¡Qué cobardía! Dicen que la multa puede ascender a 2 millones de dólares americanos, esperemos que los pagué.
(El yate del magnate mexicano)
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